Como hacer drenaje linfático

El drenaje linfático manual (DLM), es un masaje específico dirigido a solucionar el edema linfático, es decir el hinchazón de diferentes partes del cuerpo y primordialmente de los miembros superiores (brazos) e inferiores (piernas) y secundariamente es una alternativa en el tratamiento de la celulitis, ya que en ella subiste un edema a nivel graso subdérmico; finalmente es también se utiliza como complemento de tratamientos faciales (edemas faciales, post-peelings, etc.).

El primer paso es siempre, la estimulación de la cisterna de Pecquet (del quilo) y de la gran vena linfática.

La estimulación de la primera se realiza con ambas manos sobre la pared del abdomen dos o tres traveses de dedos (2 ó 4 cms; por debajo del esternón), zona comúnmente llamada "boca del estómago". Como vimos la cisterna se ubica profundamente sobre la columna, de modo tal que los dedos deben realizar una presión de cierta intensidad, pero sin provocar dolor o grandes molestias, y efectuando un movimiento como remando sobre la pared y quisiéramos empujar lo interno hacia el tórax. El ritmo es lento recordemos que el linfangión se contrae a un ritmo de 6 a 12 por minuto. Éste movimiento debe realizarse por 8 a 12 veces y se debe repetir por 8 veces. Es decir hago 8 estimulaciones promedio por minuto, repitiéndolas 8 veces (esto es lo mínimo) se pueden aumentar la veces que se repitan las maniobras hasta un máximo de 12, dependiendo de la tolerancia y la gravedad que presente el paciente.

La estimulación de la segunda se lleva a cabo en la base del cuello del lado derecho, cerca de la unión de la clavícula con el esternón, aquí realizamos movimientos de deslizamiento paralelos a la clavícula, como tratando de llevar todo hacia el tórax, por otra parte la vena linfática no está tan profunda por lo cual debemos ejercer menor una presión suave.

Esto mismo podemos realizarlo del lado izquierdo para estimular la porción final del conducto torácico.
MANIOBRAS DE DRENAJE EN EL MIEMBRO INFERIOR

En los miembros por regla general empezaremos desde el extremo más cercano al tronco y avanzaremos hacia las porciones mas alejadas.

Lo primero será estimular los ganglios o linfonodos inguinales, básicamente con la misma técnica que para las anteriores, con cierta suavidad ya que como vimos son superficiales.

El segundo paso será el drenaje por sectores del muslo, de modo tal que lo dividiremos, en una mitad cercana al tronco y otra lejana, si el edema fuera muy grosero o la persona muy obesa habrá que dividirlo en tercios. De éste modo apoyamos la mano de plano y hacemos una presión a la vez que intentamos deslizarla, cuando la mano se deslice pero no con tanta facilidad será el indicador de la presión justa (siempre preguntar si hay dolor, y en caso afirmativo realizar la maniobra con menor presión).

De éste modo a cada mitad la dividimos en una porción interna y otra externa (así será en todas las ocasiones y en todos los segmentos de los miembros).

Nos posicionamos en un sector y deslizamos nuestra mano suavemente y lentamente en dirección a los ganglios como si intentásemos escurrir el muslo, esto se llama deslizamiento profundo, también podemos usar las dos manos, y hacer presión con los bordes de los dedos índices que formarán una especie de "V" entre ellos, esto se denomina petrisage, también podemos hacer presión entre el pulgar y el índice de una mano a la vez que imprimimos un movimiento de vaivén, lo cual se denomina bombeo, estas maniobras la realizamos de 8 a 12 veces por 8 a 12 ciclos. Nos ubicamos en el otro sector y repetimos las maniobras, concluyendo con la mitad próxima del muslo, antes de pasar a la mitad alejada palpamos los ganglios para verificar si están hinchados, si así sucedió debemos estimularlos nuevamente y en caso contrario pasamos a un sector de la mitad alejada y iniciamos el drenaje. Al concluir con el muslo verificamos nuevamente los ganglios inguinales. Nunca pasamos a otro sector del miembro si los ganglios están repletos; ellos y sus territorios deben estar vaciados para permitir en vaciamiento de los siguientes segmentos.

Pasamos al hueco poplíteo (parte posterior de la rodilla) aquí tenemos ganglios para estimular y vaciar por lo tanto es lo que haremos. Para llevarla a cabo podemos hacer girar al paciente boca a bajo y drenar la región glútea y posterior del muslo o simplemente flexionar la pierna y maniobrar en el hueco.

Llegado a la pierna nuevamente dividimos el segmento en mitades y éstas en segmentos a drenar en éste caso en dirección a los ganglios poplíteos y recordar de verificar su estado antes de pasar a la siguiente mitad. Finalmente llegamos a los pies, donde para drenarlos formamos una suerte de aro con nuestra mano y confluidas las maniobras drenamos cada uno de los dedos.

Lo realizado hasta aquí constituye un pase y dependiendo del problema podemos finalizarlo o repetirlo por 3 veces más.

Al terminar 1 pase o los 4 pases su hubiese sido necesario, se culmina siempre con un pase donde las maniobras son mas suaves y mas rápidas, casi como un masaje deportivo vigorizante.
MANIOBRAS DE DRENAJE EN EL MIEMBRO SUPERIOR

Como vimos los tipos básicos de maniobras son la estimulación, el deslizamiento profundo, el petrisage y el eo. Aquí también los usaremos y también aplicaremos la técnica de proximal a distal y de la división de los segmentos y de éstos en sectores.

Lo primero será la estimulación de los ganglios o linfonodos axilares, situados como vimos en el hueco de la axila, donde el impulso se dirige hacia la base del cuello; concluidos los 8 ó 12 ciclos de 8 ó 12 estimulaciones pasamos a drenar el brazo, recordemos que en el pliegue del codo tenemos un ganglio por lo tango habrá que estimularlo y posteriormente drenaremos el antebrazo pasando a la mano y a cada uno de los dedos.

Recordar que nunca pasamos de segmento o sector si verificamos que los ganglios correspondientes se hallan hinchados.
MANIOBRAS DE DRENAJE EN LA CARA Y CUELLO

Obviamente el cuello es una zona muy delicada por las estructuras vasculares y nerviosas involucradas, esto amerita maniobras por demás suaves y delicadas.

Lo primero será la estimulación de los linfáticos de la base del cuello, es decir la gran vena linfática y la terminación del conducto torácico.

Seguidamente haremos un drenaje suave de los linfáticos a lo lago del cuello donde imprimemos algunos movimientos circulares de los dedos, ya que como vimos a lo largo del cuello encontrábamos ganglios.

En la zona inmediatamente por debajo del mentón y en por delante del oído (grupo parotídeo) tenemos grupos ganglionares que debemos estimular, también con movimientos suaves y de baja intensidad de presión.

En la cara iniciamos con un drenaje que va de la frente hacia la zona del oído, en éste caso el drenaje se realiza con uno o dos dedos. Continuamos con la mitad externa de los párpados que también se drenan hacia la los ganglios parotídeos.

Seguidamente pasamos a la mitad interna de los párpados, nariz y zona l, las cuales drenamos siguiendo los linfáticos faciales hacia el mentón.

Finalizado el pase hacemos un pasaje rápido en la zona del cuello y damos por terminadas las maniobras de drenaje en ésta parte del cuerpo.